Los perfiles que buscan las empresas en la era digital

Transformación y tecnología son las palabras clave para definir la era digital. Las empresas han debido adaptarse a la demanda de los nuevos cambios y han tenido que incorporar en su plantilla nuevos perfiles profesionales, propios del nuevo horizonte del mercado laboral. 

El sector de la tecnología en España tiene a día de hoy la misma importancia en el mercado que el sector financiero y el industrial. Las empresas tecnológicas están adaptándose a las necesidades que demandan la industria actual y a estas le permiten cubrir las acciones de la vida cotidiana, tanto en el ámbito empresarial como en el personal. 

La tecnología está presente en todos los sectores que conforman la economía española, ya que les permite mejorar su calidad, productividad y rentabilidad. Pero el sector tecnológico debe enfrentarse a los cambios con rapidez, pues la tecnología evoluciona a un ritmo constante.  

Un dato importante a destacar es que la tecnología española se encuentra en el TOP 10 europeo, según un informe sobre la Situación del Sector Tecnológico Europeo. Durante el año 2019, el sector tecnológico reafirmó su posición en la escala de la economía mundial.  

España ocupa el puesto seis en la lista de los diez primeros países europeos en materia de desarrollo y negocio tecnológico. Este puesto supone el 4% del capital total invertido en tecnología en el país. Las empresas de Barcelona ocupan el quinto lugar de la lista de ciudades europeas en materia de iniciativas empresariales ligadas a la tecnología. 

Además, 4 de cada 10 empresas españolas cuentan con procesos de inteligencia artificial. Estos procesos repercuten directamente en la mejora de la productividad.  

La inteligencia artificial es la simulación de procesos de inteligencia humana por parte de máquinas y sistemas informáticos. Las aplicaciones de inteligencia artificial más utilizadas son:

• Automatización de procesos mediante el uso de máquinas inteligentes. Estos procesos se programan y se llevan a cabo en el menor tiempo posible y con menos recursos. Por ejemplo, robots en la cadena de montaje de una empresa de automóviles.
• Análisis de datos. El empleo de sistemas informáticos permite gestionar, ordenar y analizar datos no estructurados.
• Apoyo a equipo humano. Los sistemas de inteligencia artificial sirven como apoyo a los empleados en algunas tareas. Por ejemplo, los robots analizan las características y aspectos de los clientes y los encajan en perfiles para que los gestores humanos puedan realizar propuestas a los clientes basándose en sus intereses.

Las empresas relacionadas con el sector tecnológico buscan perfiles profesionales que sepan adaptarse a los nuevos sistemas y cambios constantes de la tecnología. Estas profesiones son conocidas actualmente como STEM, las iniciales en inglés de Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas. 

Las competencias digitales han producido nuevas profesiones digitales, que son las siguientes: 

• Chief Digital Officer. Es el director de transformación digital que dirige la cadena de mando. Conoce y controla todas las competencias digitales. 
• Chief Information Officer. Es el director del departamento de sistemas de información. Se adapta a las nuevas modalidades de la tecnología. 
• Director de innovación digital. Se encarga de coordinar todas las actividades de investigación y desarrollo en base a las nuevas tecnologías.  
• Director de Marketing digital. Su función principal es desarrollar estrategias que combinen el mundo físico y virtual y siga siendo atractivo para el consumidor. 
• Director de ciberseguridad. Es responsable de asegurar la actividad de la empresa. 
• Director de contenidos digitales. Genera en contenidos digitales toda la información de las empresas. 
• Experto de Big Data. Analiza los datos y domina herramientas de software de programación. 
• Director de Smart Factory. Es experto en industria 4.0 y entiende y se forma en todas las tecnologías emergentes que afectan y cambian los sistemas productivos.

Todos estos perfiles profesionales cuentan con un conocimiento de competencias digitales esenciales para poder llevar a cabo su trabajo. Podemos diferenciar entre dos niveles de competencias digitales: básicas y avanzadas. 

Las competencias digitales básicas son: 

• Análisis de la información. 
• Resolución de problemas. 
• Centrarse en el cliente. 
• Trabajar en red. 
• Búsqueda de información. 
• Organización del tiempo y la información. 
• Generación de información. 
• Herramientas de productividad (hojas de cálculo, textos, etc). 

Entre las competencias digitales avanzadas destacan: 

• Conocer la economía digital. 
• Transformación digital de los negocios. 
• Clientes y mercados digitales. 
• Manejo de la nube. 
• Uso de reuniones virtuales. 
• Medios de pago. 
• Comercio electrónico. 
• Big data. 
• Trabajo en entorno distribuidos. 

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